Habitar el espíritu, 2014
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Habitar el espíritu
Como un espacio anexo a la cámara se encuentra el oratorio; los distintos objetos que arman la recreación del Museo apelan a una idea, la espiritualidad, que no necesita de un contexto físico para ser vivida. El artista Ignacio Llamas ha venido reflexionando a lo largo de su trayectoria acerca del arte como vía de acceso a un conocimiento que nos permita ofrecer respuestas a los interrogantes más profundos del hombre. Su instalación Habitar el espíritu plantea el oratorio como un microcosmos basado en la relación de opuestos: lo material y lo inmaterial, lo universal y lo particular, el sonido y el silencio. De este modo, frente a la contextualización de objetos que crean una ficción intentando evocar una realidad material, el artista lleva a cabo un proceso inverso: elementos descontextualizados que construyen una realidad inmaterial, el de la espiritualidad entendida como proceso. Más allá de la lectura simbólica concreta (los árboles y el latido del corazón como generadores de vida, el sonido de las campanas anunciando la muerte) a Ignacio Llamas le interesa poner en escena el sentido trascendente de una ritualidad que opera mediada por el misterio de lo ausente y por “la Belleza” como expresión in- conmensurable.
“Objetos de Deseo” es una exposición que se revela mientras recorremos la colección permanente de la segunda planta del Museo Nacional de Artes Decorativas. La base de su poética es la intromisión por parte de siete artistas actuales en un ámbito, la reconstrucción de una casa señorial del siglo XVII, definido por una temporalidad cerrada y una escenografía académica. Esta colisión entre la disciplina expositiva del museo y la intervención artística es el punto de partida de una reflexión sobre cómo se configuran las estructuras de saber y sus representaciones institucionales; al mismo tiempo, plantea la pertinencia de desarrollar construcciones discursivas alternativas y mediadas por la incongruencia, la artificialidad y la transmutación de la historia oficial.
Kristoffer Ardeña (Filipinas, 1977), Alberto Herrero (Madrid, 1989), Ignacio Llamas (Toledo, 1970), Paula Rubio Infante (Madrid, 1977), Federico Sancho (Madrid, 1979), José Luis Serzo (Albacete, 1977) y David Trullo (Madrid, 1969) subrayan una desconexión con la mirada institucional desde diversas estrategias: la fabulación, el engaño, el simulacro, el humor, el juego y la recuperación de memorias alternativas. No se trata, por tanto, de ahondar en una historia ya contada sino de examinar los objetos y los ámbitos del Museo para otorgarles nuevos atributos que, en su conjunto, puedan operar como instrumentos participativos de comprensión.